Nous oublions

Je laisse la vie m'emporter, je laisse ma plume me porter mes joies et mes peines
Pour pardonner les mots muets, le temps coule dans le sablier
Pour oublier, ne pas plier, j'avance sans savoir ou je vais.
J'essaie de tourner la page 

Hoy me reencuentro con mis tristezas. Esas que por días estuvieron veladas, como pospuestas hasta nuevo aviso. Hoy, después de algunos días, reconozco que estoy solo. Y Que en esa soledad me acompañan una cantidad inconmensurable de recuerdos. Ser de buena memoria no ayuda cuando es necesario darle tiempo al tiempo para continuar.
No entiendo bien todo lo que sucede. Hay algunas ilusiones que intentan solapar una realidad no tan evidente. Pero al final del día, darles espacio es un ciclo continuo de autoflagelación. 
Todo, en teoría, se sigue moviendo. El tiempo sigue avanzando, pero yo me quedo en el mismo sitio. Reviviendo el pasado. Evadiendo el presente. Y temiendo el futuro.
Me voy dando cuenta que engancharme en un sentimiento de pérdida es inútil, pues mientras yo me sigo sintiendo triste, los coautores de mis penas van viendo la vida con otros colores. Cada quien girando en su propia esfera. Y así debe ser. 
Pienso que, en la medida que logre aprender a desprenderme de las personas que me rodean, comenzaré a viajar por mí mismo a gusto con lo que hay, lo que falte y lo que pueda haber después. No ansiando nada, ni esperando nada. Así será mucho más fácil. 
Mientras ellos, los que han partido, sean felices, creo que entonces seré yo feliz. No como por resignación, sino con la confianza de que retenerlos es un deseo egoísta que no les permite abrir sus alas y volar, y entonces, con esa convicción, sentir que su lugar es otro, y sus caminos distintos. Que sus ausencias no disminuyen la fuerza de lo vivido. Pero que tienen ahora nuevas alegrías.  Me acostumbraré a la ausencia. Uno, tarde o temprano, siempre se acostumbra.
Dejo que la vida me lleve, dejo que mi pluma se lleve mis alegrías y tristezas.
Para perdonar las palabras no dichas, y el tiempo que avanza en el reloj de arena
Para olvidar,  sin doblegarse.
Avanzo sin saber a dónde voy… Trato de dar vuelta la página.

Comentarios

  1. Sentirme coautor de tus penas duele… sobretodo porque una de las prioridades de mi vida es verte reír y ser feliz… extrañar el maravilloso sonido de tu risa le ha quitado muchos de los colores brillantes que podían tener mis días… nunca nada me podrá robar lo importante de nuestros recuerdos y de nuestros momentos juntos pero los extraño y cada día que pasa los extraño mas

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

Ojalá nunca hayas leído nada de lo que te he escrito...

En libertad

Invicto