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Mostrando entradas de 2016

Only true love can melt a frozen heart.

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La nostalgia de la Navidad. Los recuerdos de las navidades pasadas. Los flashbacks de El Vigía, como una nebulosa sentimental. La Navidad pasada que fue inmemorable. La vida. Sus giros. Sus vericuetos. Si inexplicables casualidades. Y, por supuesto, el presente. Cuando nos hallábamos resignados a la muerte súbita, a que lo conocido cesara y diera paso a la incertidumbre, milagroso como parece, nada de lo que previmos sucedió. Era como tener una bomba de tiempo que desactivamos segundos antes del estallido. Y aunque estábamos listos para volar en pedazos, nos queda el azoro y la agitación, el estrés postraumático y la sonrisa del menos mal. Hace 18 navidades que Pablo partió. Veremos si alguna lágrima corre in memoriam. Es mi primera Nochebuena fuera de casa después de mucho tiempo. La verdad no hay mayores motivos para reconocer la fecha como especial. Y si los hubiere, mentalmente hago neto ese balance para comedir sentimentalismos exacerbados. A veces no sé si he encontrado ...

La mitad perdida de nosotros mismos.

Hay un tráfico incesante de pensamientos que atosigan mi cabeza, como buscando en sí mismos alguna manera de ser ordenados en base a un catálogo inexistente pero necesario, que aligere la carga y permita que las tormentas interiores encuentren paz. Cuando los pensamientos atormentan, es mejor escribir, para que esas mil atmósferas que amenazan con destruirlo todo en un metafórico Hiroshima se dobleguen aunque sea un poco. Según Kundera, “es posible que no seamos capaces de amar precisamente porque deseamos ser amados, porque queremos que el otro nos dé algo (amor), en lugar de aproximarnos a él sin exigencias y querer sólo su mera presencia”. De allí parten muchas de nuestras inseguridades, o al menos, una buena parte de ellas cuando decidimos hacer camino con alguien. El ser humano posee un asombroso poder regenerativo, que es capaz de enmendar hasta el alma más torturada. Aún cuando esas torturas sean autoinfligidas, y tal sufrimiento no sea más que el desencuentro de expectativ...

Season finale

Y, de repente, todo dejó de ser.  Sin previo aviso, sin anunciarse, sin darnos tiempo a recobrar el aliento. Sin dejarnos imaginar como sería la vida cuando faltase aquello de lo que nos quejábamos con insistencia. Fué casi ilusorio. Era ver pasar frente a los ojos una historia que se contó con risas, con alegría y con mucha vivencia.  Crecer y aprender, evolución constante. Mirar el pasado y sentirse satisfecho. De quien estuvo, y de quien ya no está. De lo que una vez fuimos y ya no somos. Pero sobre todo,  de saber que el tiempo fue generoso,  y la vida complaciente. La rutina aburre siempre, pero se hace necesaria. Y hoy,  en la hora de las postrimerías, sé que serán añoranzas. Llegué lleno de juventud. Parto lleno de experiencia. Menos maleable, más resabiado, más confiado y menos temeroso. Más a gusto con quien soy que con quien era. Pero siempre lleno de nostalgia. Hubo am...

Pequeñas Alegrías.

No pensé dedicarte algunas líneas, por ser lector confeso de mis idioteces. Pero estos días me han dejado cierta necesidad de plasmar en letras aquello que el verbo no tiene la elocuencia de transmitir. Quizá odies mi manera de decir las cosas, y el empalagamiento constante, y la emocionalidad insistente. Solo que yo no concibo más que esta manera para sentir. Al fin y al cabo, ¿de que vale estar vivos si no sentimos? Y siento… como si los días que pase a tu lado fueron suficientes para dejarme con unas profundas ganas de hacerlos constantes en mi vida. Y vaya que ha pasado el tiempo desde que he sentido tal cosa. Sorprendentemente tienes esa chispa que enciende las llamas de mis anhelos, aquella que creí extinguida para siempre, pero que hoy me calienta el pecho, como el sol que brillo durante estos días de asueto, unas vacaciones de mí mismo, y un festín de lo que eres, de tu sonrisa, de tus ojos, del sabor de tu boca cuando besa con deseo, de tu piel que me roza y me despierta to...

Perorata.

No he dormido bien hace días. A veces por dejar que los pensamientos acribillen mi memoria, o divaguen sobre sucesos imaginarios, o simplemente revoloteen como mariposas nocturnas buscando la luz. Vienen sucesos grandes. Cambios de paradigmas. Grandes decisiones. Redireccionar el barco. Retomar el timón. O simplemente grandes y nuevas decepciones. Mi humor cambia. Mis esperanzas merman. Mis emociones fluctúan. A veces me siento como lleno de ilusiones, y otras tantas más frecuentes me declaro un consagrado pesimista y me cargo de negatividad ante lo irrealizable que pudiera parecer el panorama. Quien sabe. Hoy recordé otro poquito. Y, por supuesto, te lloré otro poquito más, como por costumbre. Ya nada importa mucho. Hay una realidad allá afuera, que me espera para mañana.

La habitación de mis recuerdos.

"Una de las cosas que aprendí en mis años de mayor locura fue que uno podía estar en una habitación, con paredes, ventanas con barrotes y puertas cerradas con llave, rodeado de otras personas locas, o incluso metido en una celda de aislamiento a solas, sin que esa fuera, de hecho, la habitación en que uno estaba. La habitación que uno habitaba de verdad la componían la memoria, las relaciones y los acontecimientos, toda clase de fuerzas invisibles. A veces delirios, a veces alucinaciones, a veces deseos. A veces sueños y esperanzas, o ambición. A veces rabias. Eso era lo importante: reconocer siempre donde estaban las paredes reales." No sé que es más injusto. Si estar despierto sin razón a las cuatro de la madrugada, o tener que despertar temprano como si hubiera dormido toda la noche. O robar alguna pertenencia ajena, a fingir un sentimiento inexistente. O desvelarme pensando en ello, y darme cuenta que solo a mi me persigue...

Locked in a cage.

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"Nos pasaba a todos los locos, era nuestra mayor esperanza y nuestro mayor sueño: queríamos ser algo. Lo que nos afligía era lo difícil que resultaba lograr ese objetivo, así que lo sustituíamos por delirios. Había multitudes de compulsiones y obsesiones, delirios y desesperaciones... Era un sitio de un dolor indescriptible. Eso es lo que la gente que nunca ha estado loca no puede entender. Lo mucho que hiere cada delirio. Lo lejos que parece la realidad del alcance de uno. Es un mundo de desesperación y frustración." El fragmento que cito lo extraigo de mi más reciente pasatiempo. Algo que había abandonado hace rato por no encontrar en ello verdadero sosiego. Hace un par de semanas una de mis estudiantes me prestó un libro para leer. Quizá por escucharme decir tantas estupideces, o quien sabe realmente la razón. Pero me ha servido para recordar mi subyacente estado de salud mental, y, por qué no, volver a reconciliarme con aquella idea de que estoy completamente loco. ...

A veces me dan ganas de darte un te extraño.

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Verte es revolver el pasado que es aún presente para mi. Sentirme tan triste como siempre, y convencido de que el olvido es la más dura de las venganzas. Si. Para usted yo era tan sólo un rostro más en ese mar de gentes. Pero yo salgo a la calle todos los días esperando encontrar el suyo. Y en ocasiones lo consigo. No sé si por causalidades o por extrañas fatalidades. Es como si resaltaras de entre todos los mortales, aunque hace ya tiempo te expulsé del Olimpo donde te adoré con locura. Y sin embargo, puedo verte y reconocerte entre la mas tumultosa de las multitudes. Tal cual te veo en mis pensamientos de todos los días. No es palabrería. Era sentir esas palpitaciones apresuradas, esa emoción que no caduca, ese temor de cruzarnos con ansias inmensas de que sucediera. Pero seguía viéndote desde mi barrera, apreciando en silencio la realidad de tu ausencia sempiterna. Cuando llega el hastío, me propongo para siempre liberarme de tu fútil recuerdo. Pero el corazón no cono...

Un año Después del adiós.

Sin mucho que contar, hoy solo recuerdo ese amanecer abrupto del 26 de agosto de 2015. Habíamos conversado la noche anterior. Tu habías disfrutado de una caminata nocturna por la Ciudad de México, haciendo las últimas compras de lo que necesitarías ante la incipiente escasez que comenzaba a sentirse. Había cierta nostalgia. Pero tu mismo dijiste que era hora de regresar a Caracas, porque eso era entonces regresar a casa. La emoción de tu nuevo apartamento. Lo que traías para decorarlo. Una nueva emoción, la de un nuevo comienzo. Y así nos despedimos. Yo con la emoción de saberte de vuelta. Tu... No sé cual era tu emoción. La magia de las casualidades. Tu taxista que se quedó dormido me dió la más hermosa de las oportunidades. Era yo tu carta segura. Y así acudí a recibirte, porque fueron 54 días de anhelar tu retorno. Allí estuve. Te traje de vuelta a donde te sabía cercano. Compa...

La relatividad del tiempo.

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No sabemos quién lleva la medida del tiempo. Tampoco si el tiempo es una relación variable para todos por igual. Ni mucho menos si para otros ese transcurrir de días tiene algún significado más profundo. Pero puedo decir que he visto caer las hojas del calendario, pero mi corazón y mis recuerdos permanecen inmutables al paso del tiempo. No se atenúan, no se extinguen. Tampoco se refuerzan ni se revalorizan. Solo continúan estáticos, invariables, llenos de la misma melancolía de siempre, y de los mismos anhelos absurdos que la conciencia del ahora diluye en la realidad de los hechos. A veces viajo en el tiempo, para darle cierto aire de frescura a esas memorias que huelen como los buenos libros guardados en la biblioteca. Esos que al abrirlos nos transportan a una época mágica, donde vivimos las mismas historias que cuentan con tanto realismo que perdemos la noción del aquí y el ahora, y encarnamos esos personajes que ríen, sufren, y a veces, hasta mueren de amor, como el joven Werth...

En ninguna manera los muertos resucitan.

Ya casi no escribo este tortuoso recuento de mis peripecias emotivas. Creo que poco ha sucedido para merecer unas líneas. Julio pasó desapercibido. Más allá del hambre y la decepción, del abandono y de la desesperanza. Agosto es una carrera contra reloj. Por aquellos días moría de mengua ante una ausencia absurda. Y hoy, cuando aún es ausencia, ya no muero. Pero mi corazón es tonto y mi memoria viva. Y se me ha dado por esperar tu aniversario como si fuera la fecha de tu retorno. Pero por momentos la consciencia me habla y me hace recapacitar. Y aún así, llevo más de ocho meses contando estos días, para tener alguna excusa para escribirte un saludo, y sentarme a esperar como me ignoras. Así soy yo. Quizá necesite finalmente poner la lápida. Cerrar la tumba. Dejarte morir. Y comprender entonces que no hay fábulas creíbles entre ti y mi. Que todo es oníricamente creado por mí. Y que en nin...

... And Life doesn't stop for anybody

Todo este tiempo ha sido un asombroso ejercicio de retrospección. Ir atrás en el tiempo ya no parece ficción, sino una grandiosa habilidad de la memoria para revivir fantasmas. Como si fueran gigantes dormidos que se despiertan para destruir todo.  Es como escuchar el tic tac del reloj y sus revoluciones inversas, hasta llegar a esos días. A ese domingo en que esperé por una llamada que no llegó hasta bien entrada la noche, y que a pesar de ello acudí, porque mi sire bond no se negaba a nada de lo que tu boca expresara. Fuere un deseo o una sugerencia. Yo cruzaba mares infranqueables, y violentaba todos mis pactos de autodeterminación para pasar un breve instante contigo. Recuerdo que esa noche hace mas o menos un año, rompíamos papeles viejos, organizábamos lo útil, desechábamos lo viejo para dar paso a todo lo nuevo que la vida te daría en tu nuevo lugar. Ese lunes continuaba todo. Esa tarde no nos vimos. Pero...

Ojalá nunca hayas leído nada de lo que te he escrito...

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“Ojalá nunca hayas leído nada de lo que te he escrito, porque me destrozaría saber que a pesar de eso no me has buscado.” -          -    Mario Benedetti. No es cuestión de nostalgia, al menos ya no tanto. Es cuestión de resignación. Y de esta tremenda manera en que la vida buscó enseñarme cosas que no pensé que me tocaría vivir. Estos meses han sido intensamente llenos de muchos recuerdos. Es como ir enumerando los días, ya no en cuenta regresiva como antes, sino tachados de un calendario imaginario del cual voy seleccionando memorias intactas. ¡Como disfruté esos breves días a tu lado! Pareciera que mi vida se hubiera definido completamente durante nuestros tiempos juntos, aunque hablar de “nosotros” sea lo más utópico que alguien pudiera llegar a hacer, siendo absolutamente objetivos. He llegado a superar las siempre consecuentes ganas de limpiar el alma cada vez que tu recuerdo se cruza por mi mente, estaría mucho más seco de lo que hoy...

Quand est-ce qu'on va oú?

No sé bien como empezar a decir tantas cosas que pudiera decir. Porque a veces creo que valdría la pena decirlas, y otras tantas veces me convenzo de que no dedicarías tiempo a leer sandeces. Al menos no del tipo de las que yo digo. Ha pasado mucho tiempo desde que conversamos por última vez. Yo vivía la más hermosa de las casualidades. No importaba más nada que esa extraña calma que me brindaban las horas a tu lado. Eso es ya pretérito pluscuamperfecto. Soy ya viejo, y sin embargo, aún vivo de fantasías. "Tengo suficientes como para cien vidas". Pero la realidad ha sido siempre más vana y más cruel, por lo cual me es imposible aferrarme a ella. Tu, aún no sé con claridad si fuiste alguna de las dos, o siempre te mantuviste en el umbral de ambas. Los días sin ti han sido más de lo mismo. He tratado de cumplir tu exhortación al pie de la letra, y, sin embargo, heme aquí. Acostumbrarme a tu a...

El hastío

Hoy es otro de esos días en que provoca incendiar todo y verlo arder hasta hacerse cenizas. Simplemente porque sí. Ni la lluvia, ni las horas, ni el dulzor de las cosas tienen en este punto habilidad alguna para disfrazar el disgusto de la vida. Estoy harto del pasado, del presente y de pensar en el futuro. Pareciera que no hay forma de evitar que mi universo implosione en cualquier momento. No se si serán autocríticas inconscientes o reconcomios no resueltos aún. La misma mierda de siempre,  revuelta por un estúpido encuentro fortuito. La falta de trascendencia de hechos aislados. La rutina que va consumiendo los huesos. La vida de vacíos que a uno le toco vivir. Agarrarlo todo, meter la vida en un saco y caminar lejos. Abandonar ese yo que no me gusta y convertirme en el que quiero ser. Donde no exista nadie conocido, donde todos puedan irse al mismísimo infierno sin yo sentir que los necesito ni un poco. La vida hoy se reportó in...

You're still undead to me

Tienes ese efecto en mi vida. De voltearlo todo cuando parece que ya ni te recuerdo. Dije parece. Porque es una ilusión a la que acostumbro a mis pensamientos. Y, sin embargo, cada cierto tiempo te reencuentro, a veces lejos y otras tan cerca, como esta última, que revuelves nuevamente el pasado y me haces ponerle atención, como si el presente fuera a ser distinto por el mero hecho de saber que existes. Porque hasta me convencí que no eras real para poder dejar ir tus memorias. O mejor dicho, las mías, impregnadas de todo aquello que me inventé con lo vivido. Es volver a abrir la bendita puerta. Esa cámara oculta que encierra todos los demonios que me acechan. Los cuales tu tuviste una vez poder para subyugar. No es sano para mi hoy, como no lo fue ayer ni nunca. Tenerte cerca es un suplicio ignominioso en el cual reencuentro todas mis fallas, mis flaquezas y mis dudas. Aún cuando a la misma vez me sentí en paz con mis deseos, y crei haberl...

You are immortal.

No sé bien como expresar esta tristeza de siempre. La que tu recuerdo trae consigo inevitablemente. Podrán quizá pasar mil años, y todas las eternidades, y será la misma. El corazón se empeña en latir, como aferrándose a ésta charada que llamamos vida. No creo que tu recuerdes todo lo que yo recuerdo. Ni que sientas hoy algo de lo que yo me engaño por dejar de sentir. Fue bonito cuando me dijeron que quizá también  te alegrarías de verme, pero sería alimentar mis engaños e incubar más decepciones. El misántropo de Moliere. Esa es mi nueva obsesión que trataré de conseguir. Porque Alceste y yo quizá nos parecemos. O quizá no, que importa. El Sr. Le Guay enseñó que un misántropo es una persona que ha sufrido mucho dolor y mucha decepción. Y yo, fíjate si es curioso, me he sentido siempre un misántropo. Como negar que existe algo de verdad en su vis...

Serendipias y otros imposibles.

Hoy, legalmente, son 365 días con sus noches. El tiempo que conmemora esta fecha tiene demasiada magia como para olvidarlo tan de prisa. De igual forma, jamás he pretendido olvidar. Más bien, eliminar la frecuencia con que los recuerdos inundan la mente, y tratan de evocar sentimientos ya muertos. Aunque hoy me demuestre que siguen vivos. Será tal vez aquello de la ley de la atracción, el secreto. No hallo explicación coherente, pero no le atribuyo nada al destino. Simplemente porque me demostré hace ya tiempo que tal percepción es subjetividad pura. Que no existe nada escrito previamente. Que las cosas no siguen ningún curso predicho. Que es solo una coincidencia de las más hermosas, aunque conlleve toda aquella tristeza y todo los recuerdos juntos. Verte hoy fue celebrar un aniversario de ese nasciturus. Un momento entre nostálgico, alegre y cruel. Todo a la vez. ¿Por qué volteé? ¿por qué fuiste tu quie...

Here's my station.

Hubo tanta espera por ésta fecha. Como el cumpleaños o la navidad. Como si conmemorarla tuviera sentido. Pero así es, y luchar contra ello es negar una realidad evidente. Hace 365 días de nuestro casual encuentro. Tu, yo, la noche, un trago inocente. Tu té, tus historias. Las mías siempre más vanas. Esa conexión inexplicable con todo lo que eras en ese preciso instante. Y aún lo que llegaste a ser poco después. Había tanta soledad en mi alma, que me deslumbró por completo la compañía que me brindaste. Y completaste luego, no por propia intención, sino por mis anhelos, todos aquellos espacios donde los ecos retumbaban ante el silencio de mi vida. Hoy me toca recordarte como un pasado perfecto. Y nunca, jamás, como presente continuo. No estábamos destinados a ser, hoy lo acepto. No estábamos listos para tanta locura, para tanta necesidad, para tanto nosotros. No era mi hora. Aunque la vida parec...

Breaking Point

No es casualidad que la vida esté tomando este interesante giro. Ya en oportunidades pasadas, aun con el dolor de toda la suma de eventos, el pensamiento me había cruzado por la mente. No como escape a ninguna realidad, sino como redirección de una serie de experiencias que probaron no ser satisfactorias en ningún aspecto. Por supuesto, hay reservas. Miedos que también existen y que son razón de todas las decisiones tomadas, pero apuesto por una experiencia distinta. Sin conjeturar sobre los resultados, a pesar de que la idea no deja de rondar mis pensamientos, pero con una especie de esperanza placebo que de cierta forma apacigua los resquemores que el pasado ha dejado. Si, hay cierto juicio intrapersonal, como señalando que toda la lucha interna por convencerme de aquello fue casi inútil si se concibe lo nuevo. Pero luego caigo en cuenta que la vida no es sino un cúmulo de experiencias y que bien vale la pena haber tenido un poco de todo, y entonces, decidir que curso finalmente to...

Un relevo honorable

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Puede que sea el paso del tiempo. O simplemente esta mezcolanza de dolores que la vida me ha brindado en los últimos meses. Lo cierto es que hoy, en vez de celebrar la vida, siento que muero. Poco a poco, como un diagnóstico inevitable. He decidido abandonarlo todo, y aun así nada cambia. Si he disimulado un poco, hoy por ser un dia en el cual todo me es permitido, me permito el dolor, la tristeza, la desesperanza y el viaje interminable en ese espiral de desánimo. La única cosa que quiero de la vida es un imposible. Quisiera encerrarme en un ataúd, al mejor estilo Damon, y esperar que el tiempo diseque mis dolores. Hoy solo deseo un relevo honorable. De la vida. De todo y de todos. Je m'en aller...

Regalo de cumpleaños

Quisiera poder decirte mirandote a los ojos lo mucho que extraño nuestras horas juntos. Que pasan los días y recuerdo cada instante como si el tiempo fuera constante, y no este cúmulo de horas vacías llenas de tu silencio. Me siento idiota esperando una palabra que sane todos mis males, cuando sé que ya está todo dicho. Y espero por un encuentro que sería incómodo al menos para mí, pero que me perturba en pensamientos que no cesan. Solo para resignarme al hecho de que ya no existes sino en ese fragmento de vida que fuimos al no ser nada. No hay propósito para encontrarte, ni utilidad en recibirte. Y las esperanzas de que suceda son cada día más vanas y menos factibles. Igual carecería de cualquier finalidad, puesto que hemos probado que son más los desaciertos que los lugares comunes entre tu vida y la mía. Me aferro a tu memoria, aún presente como si hubieras partido por tan solo un instante. Como evadie...

Mistery man

Hacía mucho tiempo desde las últimas vacaciones. Seguro que si tuviera los medios, lo haría con mayor frecuencia, así fuera solamente para descansar de la rutina. El viaje fue largo. Los días cortos. Las risas abundantes. Los ratos amargos parecieron endulzarse brevemente. Pero home sweet home is anything but sweet. Llegar a casa es revivir todo lo que está muerto. Parece que estas paredes están impregnadas de una tristeza tan espesa que ninguna alegría puede colarla. Lo cierto es que hay nuevas personas que han entrado en mi intimidad. Que conocen quien soy mas allá de lo perceptible. O al menos parte de ello. A veces me suena repetido eso de "ser un misterio". Es como si el mundo que me rodea intentase encontrar algo más de lo que observa, sintiendo o sabiendo que hay más escondido que a la vista. Esas fueron sus palabras exactas: Eres un misterio. Uno nunca sabe que estas pensando. No sé que motiva ese halo de misterio. N...

Préstamos Literarios (II) - Samuele Beni Abram

Para estaw segunda entrega no tengo ningún prefacio. Sólo la profunda afinidad que me une a las palabras del autor, y su perfección narrativa, que siento como propia según mis experiencias. Hoy me acorralaron con un "cuentame de ti, de tu vida amorosa..." y el comentario pareció un dardo encendido, una daga afilada, un disparo a quemarropa. Sé que no hubo mala fe, pero se sintió como si arrancaran la costra de una herida apenas cerrada, fresca, reciente. Decidí recluirme en la oscuridad de mu mundo, exilarme de todos, menguar, desaparecer. Ser un taciturno a medio tiempo, y un solitario a tiempo completo. La única compañía que me interesaba, las únicas conversaciones que anhelaba, ya no son sino recuerdos de un amor pasado... ~ Querría que tú vinieras a casa una noche de invierno y, muy juntos tras los cristales empañados de una ventana, mirando la soledad de las calles oscuras y desiertas, recordásemos ...

Préstamos literarios (I) - Elvira Sastre

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Coincidencialmente hall é un fragmento de lo que me ha parecido ser una joya poética. Y debo admitir con absoluta franqueza que no sé si todo el que vive una historia similar piensa y siente de igual forma. Pero leer el siguiente poema me hizo sentir como si mi pasado reciente se proyectara como una película, y encontrar misteriosamente que las líneas que escribe el autor son las mismas que quisiera expresar pero no he podido plasmarlas con la misma belleza. Por ello, he dado inicio a lo que he titulado préstamos literarios, una serie de escritos o fragmentos cuya propiedad intelectual es ajena, pero con los cuales siento una poderosa afinidad. He comenzado por citar a la poetisa Elvira Sastre, desconociendo si es en realidad la autora de las líneas que más abajo presento. Hay al menos un escrito mas que he querido compartir, y que a su tiempo lo haré a través de esta ventana a mi mundo silencioso. Espero que de una manera u otra, algun dia quien viene a mi mente cuando lo leo pue...

La douleur exquise

Vuelvo. Hoy, después de muchos días, he decidido dedicar unas líneas a la nada. A ese lector desconocido, que no existe, pero que es fiel confidente de mis periplos emocionales, impredecibles como son, o más bien eternamente repetitivos. He leído mucho estos días de silencio. He pensado, y he dejado de pensar. O al menos de la forma en la que insistía hacerlo. A veces me cruzo con pensamientos extraños. Profundas meditaciones que logro en el silencio de cada paso, esos viernes vacíos. Sobre todo los viernes, malditos viernes de los recuerdos. Aquellos que fueron y que ya no serán. Y más que todo, aquél, que desordenó todo para que cada pieza encajara finalmente en el lugar que la realidad ameritaba. Una especie de teoría del caos según la cual se organizó la vida de acuerdo al hoy, con demasiada crudeza tal vez, pero con imperante necesidad. La douleur exquise es una expresión en francés referida a aquél dolor que causa querer a alguien inalcanzable, según entiendo. Ese amor q...

Hasta el día que me muera

Si pudiera escribirte, verte o hablarte te diría que hoy te extraño. Que te he extrañado todos los días desde que no te veo. Que me hundo en una tristeza profunda que a veces me ahoga demasiado para contenerla. Y que quisiera tan solo revivir por unas horas la ilusión de estar cerca de ti. Yo sé que es imposible, y que de deseos esta pavimentado el camino al infierno. Pero hoy me cuesta un poco dormir. Porque la tristeza me gana la batalla, y cuidado si la guerra. Me haces mucha falta. Y quizá me hagas falta hasta el día que me muera.

I keep watering my dead flower

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Hay momentos en que innegablemente sucumbo a mis memorias. Y es que caminar a la luz del día no es algo a lo que me haya acostumbrado fácilmente. Si las cosas cambian de seguro buscaré inmediatamente alguna alternativa. Es imperativo. Ese trayecto es demasiado desalentador y demasiado cruel. O al menos lo es mi mente, que le da por rescatar todas aquellas imágenes del álbum que escondí para tratar de ignorar ese sentimiento de extravío, ese vacío del presente. Cuando la angustia copa sus límites, no me queda sino acariciar la misma idea absurda, y suplicar que se convierta en realidad, con convicción absoluta de que es imposible. Porque la otra opción que idealizo es la de Alaric, suprimiendo todo sentimiento por compulsión, para asegurarme que podré seguir adelante sin ese recuerdo atormentando mis días. Una cosa es cierta: hay que dejar morir en paz aquello que ya se ha marchitado. Sin embargo, por más que se aplique una cuota básica de raciocinio, no existe manera de entren...

La enfermedad

Pasaban los días, y ya se hallaba resignado a su destino. Conocía que era muy poco probable que pudiera realizar aquellas cosas con las cuales había soñado. Se había convencido de su deslinde de la realidad, y de su terrible dependencia del mundo de los sueños, pero las circunstancias lo obligaban a despertarse. Esa tarde, como cualquier otra, regresó a su casa. No había cansancio, al menos no mayor a aquel desgaste mental que suponían sus horas en el trabajo. Y sin embargo, se sentía extraño. Había comprado una caja de cigarrillos, para ocupar la mente que vagaba, y así aminorar el peso de la lentitud del tiempo. Sentía una sensación diferente, como de un hambre voraz e insaciable. Pero reconocía que su ansiedad por lo que sabía inalcanzable era la raíz de su apetito sin aforo. Se sentía enfermo. Sabía que era como un gusanillo que crecía dentro de sí, el cual silentemente comía sus ímpetus. Sus ganas de vivir se habían anulado. No parecía haber remedio. Vez tras vez había ...

Stay with me

Ya no sé ni que pensar de todo lo que pasó. Si fue mentira o verdad, si fue ilusión vaga o mala interpretación, si fue producto de mi mente enferma o de tus juegos indescifrables. Ya no lo sé. Pero en virtud de esta nueva obsesión con Vianney decidí escuchar esa canción a dúo con Louane que recibí esa mañana mientras tu andabas por París. Hoy no sé bien si era otro mensaje subliminal a mi mente, o simplemente lo que es, una canción y ya. Particularmente me gusta la versión original. Pero como por esos días tus gustos eran mi ley de vida, igual supongo que la disfruté. Hoy escucho la letra y me invaden miles de incertidumbres. De nada valen, anyways. La verdad hoy no quise hablar de ti. Supongo que haciendo el esfuerzo de ir desintoxicando el organismo. Pero bueno, con calma y cordura. Habíamos acordado que no es olvidarte el propósito, sino remover todos los epítetos que adjunte a tu no...

Au revoir

Parece simple retórica cuando releo lo que escribo sobre avanzar. Es tarea casi imposible. Sobre todo porque las vueltas del destino son desatrosamente crueles. Anoche tuve una charla franca conmigo mismo respecto al tema de siempre. Y traté de ser lo más diáfano posible en cuanto a mis sentimientos pasados y presentes, intentando cambiar los futuros. Y había prometido dejar ir todo ese cúmulo de emociones que tengo reprimidas: a veces dolor, a veces decepción, a veces resignación, a veces un amor inconmensurable, a veces una tristeza eterna. Hoy así lo sentí. Esa tristeza terriblemente profunda que parece hacerte llorar hasta secarte, pero que a pesar de ello las lágrimas no salen. Te vi de lejos, como he esperado por días. Y fue tan duro como la última vez. En esta oportunidad completamente convencido de que tu no te percataste de mi presencia, mientras yo te seguía con la mirada suplicante, con el corazón co...

Mi mejor versión

No sé como titular estas líneas. He ido leyendo y releyendo todo lo dicho y a veces, debo ser honesto, me aburre un poco. No porque no sea lo que en realidad vivo, sino porque es encadenarse a una utopía perpetua. Y los golpes contra la realidad han sido suficientes como para frenar de una vez por todas tan absurda esperanza. Uno debe abrazar esa realidad, aunque parezca cruel y dolorosa. Y aunque provoque sentir todo el dolor que queda sin mayor dilación, para asegurar el fin del tormento, debe esperar con suficiente paciencia a que todo se agote a su tiempo. Pero las excusas si se han acabado todas. Entonces, sin más excusas, debe ser pertinente borrar el daño de estos días oscuros, reconocer quien soy, donde estoy y lo que la vida misma dispuso para crecer y avanzar. Damon enfrentó su infierno. Su tormento sin fin era la aceptación de un profundo sentimiento de abandono. Y fue entonces cuando su espíritu se liberó de la cautivi...

Mais t’es où? ...Pas là

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Hoy me entrego al recuerdo, porque la ausencia es mucha. Porque volver a la realidad de la que escapo a ratos tarde o temprano me pediría enfrentarla. Ningún lugar me hace sentir mas sólo y miserable que esa terraza. Ella ha atestiguado demasiados momentos donde por breves instantes la vida ahoga. Allí, hoy, volví a escuchar el eco de mi vida vacía. Volví a sentir el temor de ver la tarde caer. De encontrarme nuevamente sin rumbo. Pero esta vez no huí. Solo quedaba caminar de vuelta. Habría sido estúpidamente inútil hacer el viaje sin destino. No hubiera importado la prisa, ya no había que hacer tiempo. De igual forma, soy un viajero errante, y mis pensamientos son demasiados para atenuarlos inocentemente. Igual en todos lados eres sólo un espejismo. He encontrado una canción hermosa. Y he recordado que una vez dijiste que me gustaban las canciones tristes y depresivas. No pudo haber mayor verdad en tus palabras. Como de costumbre, te he revivido. Como Elena, cuando no se resignab...

And i wish i was a comet to crash at your feet, just to be remembered

De Jordan Bach aprendí que la necesidad de aceptación nos lleva a traicionar a veces nuestro propio valor como individuos. Pero que también existe un momento de reflexión sobre nuestro comportamiento que nos ayuda a reconocer aquello que disminuye esa cualidad de ser auténticamente nosotros mismos por temor a no gustar. ¿Y por qué temer a ser distintos? Hay quienes no nos aceptan con nuestros errores, como si no fuera válido aprender aún de los ajenos. Sin embargo, nuestro "yo superior", como le llama, nos servirá de consultor en momentos de duda, cuando la confianza nos falle. Me hizo considerar todo aquello que pienso me ha hecho 'no merecedor' de ciertos afectos. Y me enseñó que la percepción ajena no debe ir en detrimento de lo que sabemos sobre nosotros mismos. La opinión de otro sobre mi bondad no disminuye la realidad de que yo pueda ser una buena persona, a pesar de mi probada humanidad falible. Así concluí que no hay nada de malo en ser yo. Contando mi...